Bajo el liderazgo de la entidad Loser Surfers, la iniciativa cuenta con el apoyo del Parque Natural del Alt Pirineu, el Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici, y la colaboración de las estaciones de esquí y montaña de Espot Esquí y Port Ainé.
Las estaciones pallaresas de FGC TURISME reafirman su compromiso ambiental, centrando la recogida de residuos en aparcamientos y accesos para maximizar el impacto visual y ecológico.
Las estaciones de montaña pallaresas de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) Espot Esquí y Port Ainé reafirman un año más su firme compromiso con la preservación del medio natural con la puesta en marcha, este fin de semana, de la quinta edición de las jornadas Mountain Calling.
Esta iniciativa, liderada de la mano de la entidad local Loser Surfers, el Parque Natural del Alt Pirineu y el Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici, tiene como objetivo principal recoger residuos y concienciar sobre la importancia de mantener los entornos de montaña limpios y saludables para todos. Las acciones se llevarán a cabo en Port Ainé el sábado 27 y en Espot Esquí el domingo 28 de septiembre.
Este año, la limpieza se centrará específicamente en la zona de aparcamientos y accesos de ambas estaciones. Esta decisión estratégica responde a la detección de una mayor acumulación de desperdicios por parte de los usuarios en estos puntos, lo que permite así una gestión más eficiente de los recursos y un impacto más directo en la mejora visual y ambiental de los principales puntos de entrada a estos equipamientos turísticos.
Para todas aquellas personas que visitan las dos estaciones de esquí y los dos parques a lo largo del año, participar en el Mountain Calling es una buena forma de contribuir a compensar la huella ecológica que generan en su visita turística. Una huella que pueden calcularse a través de la plataforma Gratitud Pallars, y contribuir así al turismo regenerativo que impulsa la Carta Europea de Turismo Sostenible del Alt Pirineu (CETS).
Las cuatro ediciones anteriores de la Mountain Calling han demostrado la eficacia y la importancia de esta iniciativa. En las tres primeras, más de 200 voluntarios se sumaron al proyecto y se logró recoger un total de 2.000 kilos de desechos. La cuarta edición recogió 850 kg de basura, de los cuales 300 kg eran chatarra; 50 kg, madera; 100 kg, vidrio y 400 kg de desecho. Estas cifras refuerzan la necesidad de continuar con la labor de limpieza y, sobre todo, de concienciación ciudadana por un Pirineo más sostenible.
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